LA HISTORIA DEL SOMBRERO
Historia
Los primeros
sombreros tienen sus origenes en los imperios antiguos, en Egipto ya se
utilizaban diversos tipos de tocados, pero uno de los más reconocidos antecedentes
del sombrero fue el gorro frigio, un sombrero de origen persa que fue utilizado
por los griegos para simbolizar que todo aquel que lo portara era un esclavo al
que se le había otorgado su libertad. En Grecia también surgieron el Pilleus y
el Petasus, siendo el petasus el primer sombrero que tenía ala.
El sombrero surge
como una necesidad para protegerse del sol y la lluvia, principalmente entre la
comunidad productora. Los primeros sombreros eran fabricados principalmente de
fieltro y de lana. Los sombreros de los antiguos eran generalmente blancos como
lo observamos en muchos vasos pintados que nos quedan de la antigüedad.
Sófocles hace aparecer a Ismena la más joven de las hijas de Edipo adornada con
uno de estos sombreros cuando habiéndose escapado de Tebas fue a Atenas a
juntarse con su padre.
En tiempos de
Carlos VI de Francia comenzaron a usarse sombreros en el campo. En el de Carlos
VIII se introdujo su uso en las ciudades pero tan solo en tiempo de lluvia. En
el reinado de Luis XI ya se habían generalizado más y se llevaban en todo
tiempo extendiéndose su uso a las naciones vecinas. Consta que Carlos IV de
Francia llevaba sombrero de castor al hacer su entrada en Ruan en 1494. Este
sombrero estaba forrado de terciopelo carmesí y llevaba en el remate una borla
de hilo de oro.
Los grandes
comenzaron luego a usarlos guarnecidos de plumas, cordones y otros adornos
mientras el clero y la plebe continuaban llevando capillas o capirotes. Más
adelante, el uso del sombrero fue generalizándose variando la forma según la
época y hoy se usa comúnmente en todo el mundo civilizado.